La piel de alrededor del área del contorno de los ojos es extremadamente delgada. Es cinco veces más fina que la del resto de la cara y hasta diez veces más que la de otras partes del cuerpo. Y no sólo eso: es la que más movemos al expresarnos y al hablar (incluso más que la zona que rodea nuestros labios). La zona del contorno de ojos presenta un pH distinto al del resto de la cara, así que una crema normal podría causar alergias e irritaciones. También es la zona que más refleja el cansancio. Lo hace porque la microcirculación sanguínea y linfática alrededor de los ojos es más lenta; y, al ser la piel tan fina, deja que se vean fácilmente los signos de cansancio.
Un contorno de ojos debe contener activos que estimulen la microcirculación sanguínea, activos descongestionantes y anti-inflamatorios para combatir ojeras y arrugas. Como lo vemos, debe tratarse al contorno de ojos de forma independiente al resto del rostro.