Las marcas orgánicas son son aquellas que usan materias primas de origen natural como grasas y extractos vegetales, ceras y aceites esenciales cultivados sin químicos, plaguicidas ni agroquímicos.
El concepto clave en materia de orgánicos es la trazabilidad: es decir que el sembrado, el cuidado, la recolección del fruto y luego la transformación en aceite, gel u otra textura y su posterior elaboración en un laboratorio se hagan de acuerdo a lo que dispone la normativa.
Aunque muchas veces la palabra natural se utiliza como sinónimo de orgánico, no todo lo que parece bio, lo es. Los productos orgánicos requieren una certificación que acredite que han crecido y se han procesado según estándares controlados.
